miércoles, 31 de octubre de 2007

El vigaucho

Salimos a la calle y los primeros fresquetes invernales ya se empiezan a notar en Bruselas. Mi hijo menor se pone menos ropa que la que cualquier madre con un cierto sentido de la responsabilidad aceptaría y entonces se sucede el siguiente diálogo:

-Abrigate un poco, nene.

-Mamá, dejame ¿no ves que soy un vikingo? -dice, mientras saca pecho y se inventa músculos.

-No, abrigate más, mocoso, que vos no sos todo vikingo. Nomás sos medio vikingo.

-Ah, sí! -Y se le abren los ojazos mientras la idea le pasea por el cerebro.

-Medio vikingo, medio gaucho, -me río y le saco la lengua.

-Un vigaucho! -exclama. No, mejor un gaukingo!

Inventa palabras, se ríe. Y se abriga, el mesticito.

domingo, 28 de octubre de 2007

Voto de emigrante

Al final, anoche casi no me podía dormir, con la anticipación de mis primeras elecciones argentinas después de 20 años. Hoy a la mañana, no hablaba de otra cosa, hasta que recibí un "Bueno, ya está bien" a tres voces.

Me fuí para la embajada esperando encontrar allá, por lo menos, mejor ambiente. Pero tampoco. Lo primero que me crucé fue otro ejemplar de argentina que iba a "justificar el voto". Cómo ¿no votás? -le pregunté. No, yo no voto, ni quiero votar -me contestó, de lo más seria.

-Vos sí votás, Ana ¿no? -me preguntó la presidenta de la mesa.
-¡Obvio! -exclamé, de lo más entusiasmada.

Pero yo estaba de lo más convencida que votaba con domicilio en Bruselas y que eso de votar autoridades nacionales, como me habían informado en la convocatoria que recibí hace como un mes, implicaba que sólo podía elegir al presidente y para eso me había preparado.

Flor de sorpresa me llevé cuando me enteré que votaba autoridades nacionales en el distrito que fue mi último domicilio en Argentina, es decir la Ciudad de Buenos Aires, y que además del presidente tenía que elegir senadores y diputados. Caramba.

Empecé a mirar por todos lados y lo único que encontraba eran las listas de los partidos pegadas a las paredes del pasillo de entrada. Me puse a temblar, horrorizada con la idea de tener que votar en blanco o, peor todavía, a ciegas. Adentro están las listas de los candidatos -me dijeron, y me tranquilicé un poco.

Monopolicé la entrada durante por lo menos media hora hasta que me terminé de estudiar todas las listas. Y voté para presidente, diputados y senadores nacionales por la Reina del Plata haciendo la combinación más rara que hice nunca.

Media hora más tarde suspiré y dije en voz alta: "Estoy bien contenta con lo que voté".

Y así es. Mis candidatos no entran ni primeros ni segundos pero eran, creo, lo mejorcito que andaba por las listas.

Y ahora sólo nos queda esperar cuatro años de buen gobierno.

lunes, 15 de octubre de 2007

Decidiendo

Parece que la suerte del irlandés alcanzó hasta las semifinales y bien así, sino este blog se iba a transformar en lo más aburrido de la blogosfera.

Mientras tanto yo intento decidir qué voy a votar el 28, así que se aceptan sugestiones. Pero fundamentadas, eh.

Hace 20 años que no voto en Argentina y estoy casi ilusionada como la primera vez.

lunes, 1 de octubre de 2007

SMS

Ayer a la noche mi móvil hizo el ruidito que hace siempre cuando llega un mensaje. Cuando lo leí decía:

Big respect for Argentina –well done! They can get into semi and maybe the final too. Good luck!

Lo firmaba un irlandés.