domingo, 22 de octubre de 2006

Más música

Fin de semana agitado, gracias, entre otros, a Partyanimal, al que visito todos los viernes a la mañana para ver que pasa en BRU durante el fin de semana. Este viernes me enteré que había otra vez concierto de Ojos de Brujo, grupo que me había quedado sin ver unos meses atrás y, encima, en la Ancienne Belgique, una de mis salas preferidas para escuchar música en esta ciudad. Aprovechando que él siempre tiene mucho cuidado en poner todos los links necesarios, me fui derechito a la página web a comprar las entradas para toda la familia.

Lugar raro, la Ancienne Belgique. El nombre es francés, pero uno llega ahí y toda la gente que trabaja habla en flamenco, lo mismo que la mayoría del público. Además, los folletos, revistas, postales y todo el material gráfico y/o publicitario que uno se puede llevar a su casa sin pagar también están en flamenco. Lo mismo está pasando con Flagey. Uno llega a esos lugares, completamente analfabeto en esa lengua y se siente un poco raro y hay que hacer un esfuerzo, casi, para decidirse a hablar en francés y pedir las entradas o algo para tomar. Pero las dos salas son perfectas para ir a conciertos y, además, eso hoy no fue ningún problema ya que el idioma que más se escuchaba en el lugar era éste en el que escribo y el flamenco esta vez no era un idioma, sino una música.

Al final, terminé yendo sin marido pero con una invitada de once años, además de mis dos hijos. En algún momento del concierto me puse a pensar en lo estimulados que están los chicos de esta época comparados con los de mi generación. Y se me volvieron a ocurrir las dos ideas que siempre vuelven cuando pienso en ese tema. Una es la preocupación por saber si el cerebro les dará a los pobrecitos para poder digerir tantos estímulos y tanta información. La otra es la pregunta que me hago siempre sobre quién y cómo sería yo hoy si hubiera recibido, en mi infancia y adolescencia, esa misma cantidad de estímulos y de esa calidad. Porque hay que terminar este post diciendo que los Ojos de Brujo son realmente impresionantes y que el concierto de hoy quedará en la memoria de esos tres nenes como una de esas experiencias musicales que a mí, a esa edad, me hubieran dejado completamente maravillada y con el cerebro más abierto.

10 comentarios:

Ulschmidt dijo...

Suenan muy bien estos "Ojos brujos" que usted deja, para mis oídos además suena exótico. No les estallará la cabeza a nuestros niños por la gran estimulación que reciben aunque la calidad no suele ser como esta que hoy nos presenta - habiendo tanta variedad, tanta riqueza cultural, y como muy bien dijo relativamente tan accesible ahora con respecto al pasado, con respecto a nuestra niñez e igualmente a veces parece que todo converge a las mismas cosas, los mismos juegos de video, los mismos tres programas de la tele, un grupo de rock de moda, un best seller mas bien superficial cuando no bien tonto - como si hubiera un gran desperdicio de oportunidades. IGUAL ESTAMOS MUCHO MEJOR QUE ANTES estoy seguro.
¿ Cuántos idiomas maneja Ud.? Yo soy fabulosamente torpe con los idiomas, como todos los de mi oficio.

PartyAnimal dijo...

Pues me alegro que mi post haya servido para que disfrutaras de los espectaculares ojos de brujo...yo los vi cuando vinieron la primera vez y realmente fue toda una experiencia musical...es que transmiten una energia y una electricidad con muchas ondas positivas...son geniales!!

Betibu dijo...

Lo que más me gusta de Ojos de brujo es su frescura, y el entusiasmo que ponen cuando tocan. Estuvieron estupendos. Que suerte tienje los adolescentes de hoy!!.
Es cierto lo que decís del flamenco en esos lugares, Personalmente no me molesta ya que es el casi único contacto que tengo con esa parte de la población belga.

Ana C. dijo...

Ulschmidt, a mí me hace pensar bastante el tema de los cerebros infantiles. A veces me da miedo que con tanto estímulo que reciben dejen de pensar por sí mismos o que de repente les de un corto-circuito cerebral. Nomás le digo que mis hijos hablan cuatro idiomas, los mismos que yo, con la diferencia que ellos los aprendieron desde chicos, lo que supongo les facilitará la vida, y yo de grande. Aunque bueno, supongo que será ese no-sé-cuánto-por-ciento de capacidad cerebral desaprovechada que tenemos todos. Lo suyo no es torpeza ni tiene que ver con la profesión, sino que es el resultado de vivir en un continente enorme donde no se habla otra cosa que castellano. Le pasa lo mismo a los norteamericanos y a los ingleses. Si se hubiera criado acá, seguro que hablaba por lo menos cinco.

Partyanimal, no es la primera vez que hago algo de lo que ponés en tu blog. Y este fin de semana seguí tus recomendaciones no sólo el domingo, sino también el viernes!

Betibu, bienvenida! Veo que también vivís por estos pagos. ¿Sos la beatriz de hace unas semanas? A mí no me molesta lo del flamenco, en general me parece bastante cool, pero me siento un poco rara en esas situaciones. Lo peor es cuando uno va a Lovaina o Amberes y no sabés en qué hablarles.

Betibu dijo...

Si, Ana soy la misma, y vivo en Bruselas. Los flamencos también me parecen super cools, cuando he ido a Lovaina (tarde un rato en darme cuenta de que ciudad hablabas..ja, ja) les hable en ingles..aunque me prometí que un día voy a aprender su idioma.

Anónimo dijo...

Pero... cuando era chico fuí a un recital de Pedro y Pablo, Piero, palpé el nacimiento musical de Lerner y de todos modos quedé así de nabo !!
Me pregunto que habrá fallado...

:(

Al revés que vos creo que la sana estimulación da lugar a gente mas inteligente, sensible, abierta, etc. Por lo menos es lo que he visto en casas donde simplemente eran bilingües (excepto los alemanes, ojo). Ni hablar de la música.

Lo que podría anegarles el cerebro es la sobredosis de playstation, animé y sms.
Se que no es el caso en tu flia.
Besos.

Caracol

Anónimo dijo...

Aclaro que lo de los alemanes no es ningún prejuicio de mi parte (de hecho se supone que tengo 25 % de sangre tedesca) sinó la mera observación.
Puede que los que conocí al ser muy, pero muy estructurados y rígidos con sus hijos hayan "anulado" de algún modo el efecto.

Caracol (aún no puedo linkearme aquí, pues su blog sostiene denodadamente que soy Juanjo...)

Ana C. dijo...

Commentor, en realidad no me lo paso de farra en farra, pero a veces se me juntan todas. En tu cerro no se cómo será la cosa, aunque no da la impresión que sea muy aburrido, todo lo contrario!

Betibu, de vez en cuando pienso también en ponerme a aprender flamenco, pero creo que antes me gustaría aprender italiano, alemán o árabe, así que me parece que tendrá que esperar para otra vida.

Caracol, no pensás nada al revés que yo, sino exactamente lo mismo. Lo único que a mí me dejan completamente impresionada las cosas que saben y las experiencias que han tenido mis hijos comparadas con las que sabía y había tenido yo a la misma edad y a veces me asusta un poco.

Eso de que no puedas entrar como Caracol, a lo mejor tiene que ver con que hace una o dos semanas hice el cambio a Blogger Beta. La forma de registrarse es un poco distinta.

PartyAnimal dijo...

Y pronto viene Indochine, en diciembre...pero los tickets ya estan agotados...por eso puse info sobre otro concierto en bruxelles en marzo!! pero si te interesa, a por los tickets!!

Ana dijo...

ME pregunto lo mismo en cuanto a mis hijos y los chicos en general. Esa cultura visual, la cultura del video clip, las imágenes que duran décimas de segundo, y por otra parte los megaespectáculos, con efectos visuales, sonoros, etc. por no hablar de los juegos de compu, con sus realidades virtuales tan complejas y que ellos dominan tan bien. No se si sean buenos o malos, pero estoy segura de que deben generar efectos en sus cerebros, modos de ver la realidad diferentes, quiza en algunos años se puedan sacar conclusiones sobre las consecuencias, esperemos no sean negativas.